Producto nacional

Las destituciones de Scott Roth como técnico del CB Sevilla y de Velimir Perasovic por el Valencia Basket dejan a la Liga Endesa con una situación que debería enorgullecernos. Todos los entrenadores, los 18 místers de la ACB son españoles. Los hay mediáticos como Joan Plaza (Unicaja), Pablo Laso (Real Madrid), Xavi Pascual (Barcelona) o Aíto García Reneses (Gran Canaria), los hay habituales de la liga como Txus Vidorreta (Estudiantes), Salva Maldonado (Joventut) y Pedro Martínez (Manresa), los hay jóvenes pero ya contrastados como Sito Alonso (Bilbao), Jaume Ponsarnau (Guipuzkoa), Alejandro Martínez (Tenerife) o Moncho Fernández (Obradoiro). Hay recién llegados como Diego Ocampo (Murcia), Joan Peñarroya (Andorra), Hugo López (Fuenlabrada) e Ibon Navarro (Baskonia). Los dos últimos en llegar: Carles Duran a Valencia y un Luis Casimiro que vuelve a la Liga en la capital hispalense.
Podríamos analizar las razones de lo anterior; económicas (cobran menos que un extranjero), culturales (tardan menos en adaptarse), deportivas (un país de buenos técnicos) o la casualidad. Lo importante es que todos son de España y eso nunca puede ser malo para una Liga nacional. Solo se me ocurre un problema, si en teoría, los 18 mejores entrenadores ya están ocupados y no pueden entrenar a la selección, ¿quién ocupará el banquillo nacional? Con un Europeo clave a la vuelta de la esquina, la FEB tiene trabajo y del sucio.